Mi yo en este deporte

Buenas tardes futboleros. Hoy os traigo una entrada especial. Especial en el sentido de que es sobre mí. Sobre mi experiencia con el fútbol y de como he ido enamorándome de este deporte.

Como mucha gente, el fútbol entró en mi vida por la vía familiar. Padre y abuelos marcaron a fuego en mi piel el equipo de mi vida: el Real Madrid. Los mejores recuerdos que tengo siempre están relacionados con mi equipo y con mi familia. Los Clásicos en casa, las visitas al Bernabéu o las llamadas telefónicas con mi abuelo después de un partido. Para muchos es un simple deporte pero a mí me ha dado la vida.

Desde pequeño siendo merengue

Desde pequeñito he jugado al fútbol. Antes, en mi antiguo barrio, la Elipa, tuve la mala suerte de no poder jugar la liga. Sólo se podían inscribir los jugadores nacidos en el 95. Mucha mala suerte la mía ya que, por 5 días, nací en el 96 y no en el 95. Aún así, yo iba todos los martes y jueves a entrenar, aunque no pudiera jugar el sábado. Yo disfrutaba igual. Eso fue durante un año.

Al año siguiente me mudé a Vicálvaro. Aquí encontré el equipo por el que jugué nada más y nada menos que 11 años seguidos. Desde primer año de benjamín hasta el tercer año de juvenil. Aquí sí pude jugar. Aquí hice amigos. Y aquí encontré una felicidad que pocas cosas en la vida me dará. Tengo muchísimos recuerdos de partidos. Desde salir llorando de un partido por meterme dos goles en propia a celebrar el ascenso contra el rival directo. Aquí en Vicálvaro existe un derbi entre la EF Vicálvaro y el CD Vicálvaro. Los mejores partidos que he jugado son estos. Siempre había tensión y te enfrentabas a amigos del barrio que querías ganarles para estar toda la siguiente semana riéndote de ellos. Fui capaz de jugar unos cuantos partidos con la Selección de Madrid en el que también disfrute muchísimo y aprendí más aún.
Yo empecé de banda izquierda porque era de los pocos que sabía darle un poco con la zurda. Después, pasé al centro del campo, o bien de mediocentro o mediapunta. Algún partido jugué de delantero pero muy pocos. Siempre con el dorsal 11 que es mi número favorito.

Camiseta que defendí 11 años, siempre con el 11 a la espalda.

Como ya he dicho, los mejores recuerdos son con el fútbol. Partidos que nunca olvidaré como la final del Mundial en la que lloré de alegría y que escuché a mi madre decir la frase: "Cierra la ventana que se nos tira por la ventana". Partidos como la final de Lisboa en la que el Madrid consigue su décima Champions y como en el minuto 87 estaba tumbado en la cama para volver en el 90 y disfrutar como no lo he hecho en mi vida. Yo soy de los típicos que va a un bar con sus colegas y se queda embobado mirando cualquier partido.

Salí de la mano de Iván Helguera en un partido de Champions

Quizás sea un problema el que tengo con el fútbol pero... ¡Bendito problema! Que todos los problemas sean así, ¿verdad?

Multitud de camisetas. Desde camisetas del Chelsea a tener de la selección de Túnez. Mi habitación esta llena de fútbol. Libros, bufanda del Cádiz o de España, mi rincón del Madrid con vídeos de los 100 años de historia o muñecos de los Looney Tunes vestidos de blanco...

Espero que os haya gustado esta entrada, un poco más personal de lo normal pero que la he hecho con muchísimo gusto. Aquí os dejo una frase que estoy al ciento por cien con ella.

"La vida me dio dos piernas para jugar al fútbol, no para ir detrás de una chica a la que no le intereso" El Shaarawy